Un día; unos duendes tomaron una pócima mágica que les hacía convertirse en niños. Ellos se quedaron muy impresionados. Caminaron a la casa del mejor mago de Duendelandia. En el bosque, se encontraron dos flechas; no sabían cual elegir y al final se decidieron por la derecha. Siguieron andando pero no encontraban la casa del mago y se preocuparon pensando que se habían perdido.
Era ya de noche. Tenían mucha hambre. Vieron una fábrica donde hacían los juguetes para niños. Uno de los duendes se dio cuenta de que era la fábrica de los Reyes Magos; entraron y se quedaron asombrados. Preguntaron a Baltasar si les daba comida y si podían dormir allí.
Comieron y durmieron plácidamente. A la mañana siguiente, emprendieron su camino en busca del mago y esta vez lo eligieron bien. Entraron en la casa del mago y él cogió una pócima y lo arregló todo.
Que tiemblen Edgar Allan Poe, Julio Cortázar, Jorge Luis Borges... pues ya están aquí los "relatistas" del futuro.
Desde un rincón de Vallecas, derrochando creatividad mientras buscan su estilo, tengo a bien presentarles estas pequeñas joyas literarias. ¿Quién sabe si será el comienzo de algún gran escritor?
Mientras salimos de dudas estos jóvenes "cuentistas" continuarán sacándole punta al lápiz.
Desde un rincón de Vallecas, derrochando creatividad mientras buscan su estilo, tengo a bien presentarles estas pequeñas joyas literarias. ¿Quién sabe si será el comienzo de algún gran escritor?
Mientras salimos de dudas estos jóvenes "cuentistas" continuarán sacándole punta al lápiz.
Me a gustado mucho la historia sobre todo el final.DE SOUAD
ResponderEliminarMe ha gustado mucho pero,¿De quién es?.Nacho
ResponderEliminarEl cuento es de David. Nicole
EliminarQue divertido el cuento. Nicole
ResponderEliminarMuy buen cuento.Me ha gustado mucho.De Edwin
ResponderEliminarQué divertido es. Julia
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
EliminarSaludos desde Vigo.
Es muy divertida y espontánea.
ResponderEliminarAinara
Me gusto el cuento haaa
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