Además era un perro muy completo: limpio, guapo, astuto… las chicas se morían por él y sus amigos estaban celosos porque las chicas solo se acercaban a él.
Un día los perros estaban cansados de que no se acercase una chica, así que planearon una estrategia: al salir de la puerta los amigos del perro se pusieron una máscara y le tiraron basura a la cara. El perro se disgusto mucho. Las chicas le vieron y fueron a preguntarle que le habían tirado. Luego le ayudaron a limpiarse.
Otro día de perros fueron a verle y le hicieron una propuesta de que se que dará una semana entera sin bañarse y el perro aceptó. Pasó una semana sin bañarse y los amigos fueron a ver como estaba. Tenía cientos de pulgas por todo el cuerpo. Olía mal y les informó que había aguantado. Luego se baño. Se le quitó el olor pero había un problema, no se le quitaban las pulgas. Al final las chicas no se le acercaron y tampoco se atrevió otro tipo de animal.
Desde entonces todo el mundo le llama el perro con pulgas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿QUÉ TE HA PARECIDO?