Que tiemblen Edgar Allan Poe, Julio Cortázar, Jorge Luis Borges... pues ya están aquí los "relatistas" del futuro.

Desde un rincón de Vallecas, derrochando creatividad mientras buscan su estilo, tengo a bien presentarles estas pequeñas joyas literarias. ¿Quién sabe si será el comienzo de algún gran escritor?

Mientras salimos de dudas estos jóvenes "cuentistas" continuarán sacándole punta al lápiz.

martes, 1 de abril de 2014

PARANORMAL (SUSPENSE)

Nadie me cree. Todos creen que estoy loco, y para que me crean estoy grabando un video de una noche en mi casa. - dice Alejandro mientras abre la puerta de su habitación - ¡¿pero qué?! - exclama al ver una silla del salón deslizándose por las escaleras del pasillo de enfrente de su habitación - creo que voy a bajar por mucho miedo que tenga – dice antes de bajar al salón. Al entrar se queda con la boca abierta al ver una sombra a través de la ventana con la mano alzada para llamar.

Si me quedo muy quieto y no hago ruido esa sombra fantasmal se irá – pensaba Alejandro, pero aquella sombra llamó a la puerta y el joven muerto de miedo decidió enfrentarse a lo que fuera y abrir la puerta - ¡ Será un vendedor ambulante, un cobrador de morosos (aunque creo que no debo a nadie), puede ser un viajero perdido en busca de información…- Al abrir la puerta se encontró con un anciano que se presenta como el antiguo propietario de la casa y le pregunta si puede pasar a hablar con él. Alejandro le hace pasar al salón pensando que cuando viese los jarrones volando, las sillas arrastrándose por el suelo, las lámparas encendiéndose y apagándose y todas las cosas raras que pasaban le iba a dar un trombo al corazón, pero nada más lejos de la verdad pues el anciano le miró muy serio y le dijo -sé lo que pasa aquí, a mi me pasó lo mismo y me tuve que ir de esta casa, pero he seguido investigando y sé lo que pasó. Hubo un asesinato y la policía dio por hecho que se suicidó cerrando el caso. Se quien lo mató pero ya ha muerto y el fantasma no lo sabe por lo que tú se lo tienes que decir si quieres que se vaya para siempre.

Alejandro estaba alucinado por lo que le estaba contando el anciano mientras todos los muebles y aparatos de la casa volaban alrededor de ellos, pero necesitaba saber cómo echar a ese fantasma y vivir tranquilo por lo que preguntó:

- ¿Que necesito para informar al espíritu de que no se puede hacer justicia, por lo menos en este mundo, y que ya puede descansar en paz?

– Necesitas meter en agua bendita una lámina de hierro en la que ponga el motivo a fuego y en castellano antiguo. Así a las 00:00 el fantasma se habrá ido – le aclaró el anciano.

Alejandro a la mañana siguiente se fue a la iglesia más cercana, compró un soldador y una lamina de hierro para escribir el mensaje a su fantasma.

La noche siguiente se quedó escondido en un rincón del salón hasta que llegó la hora.

A las 00:00 en punto sintió un escalofrío por todo el cuerpo y vio como una luz bajaba por la escalera y se paraba al lado del cuenco como si estuviese leyendo su mensaje, al momento se empezó a materializar en forma humana, era un hombre joven, alto y moreno.

Se detuvo enfrente de Alejandro y le dio las gracias y le pidió perdón por todo lo ocurrido en su casa.

- He pasado mucho tiempo esperando que alguien me hiciera justicia, por lo que me cuentas el hombre que me mató ya no existe por lo que ya debe haber pagado por su crimen. Pide disculpas al anterior propietario y dale las gracias por no olvidarse de mí, ya puedo irme para siempre.

Alejandro, antes de que desapareciese le dijo:
- Perdona pero ¿cómo te llamas?

- Me llamo Alejandro.

2 comentarios:

¿QUÉ TE HA PARECIDO?